Plug-and-Play (PnP) es un estándar que permite la conexión automática de dispositivos a un ordenador, eliminando la necesidad de configuraciones complicadas. Al conectar un dispositivo compatible, el sistema lo identifica y lo configura automáticamente, facilitando su uso inmediato. Esto ha simplificado la interacción con la tecnología y ha promovido una mayor adopción, ya que permite a los usuarios utilizar dispositivos sin conocimientos técnicos previos. En resumen, PnP hace que la instalación de hardware sea tan fácil como «enchufar y usar».